EL TURISMO MICE EN CANARIAS: UN POTENCIAL POR DESARROLLAR

Las Islas Canarias, con su clima envidiable, infraestructuras de vanguardia y conexión con las principales urbes europeas, parecen el escenario perfecto para el turismo MICE (Meetings, Incentives, Congresses, and Events). Este archipiélago ofrece una mezcla única de trabajo y descanso, en un ambiente que muchos europeos consideran exótico. A pesar de estas cualidades idóneas, las Islas Canarias aún no han logrado posicionarse al mismo nivel que destinos como Málaga o San Sebastián en la captación de congresos, sin mencionar a las gigantes Madrid y Barcelona. ¿Cuáles son los desafíos que enfrenta Canarias para ascender en el mundo del turismo MICE? Un factor es la predominancia de la turoperación, que limita la disponibilidad hotelera para eventos de esta naturaleza. Organizar un congreso de mediana escala requiere una cantidad significativa de habitaciones disponibles, algo complicado en un destino donde los hoteles, mayormente vacacionales, trabajan con contratos anuales. Sin embargo, la principal barrera parece ser la promoción insuficiente de Canarias como destino MICE. Aunque cuenta con infraestructuras congresuales sobresalientes, la percepción predominante sigue siendo la de un destino vacacional. Algunos espacios para eventos, a pesar de su potencial, quedan marginados por las altas expectativas económicas de sus gestores, según indican operadores del sector. Pese a estos obstáculos, el turismo MICE generó en Canarias alrededor de 350 millones de euros en 2022, demostrando un potencial de crecimiento considerable. Incluso el Parlamento de Canarias ha intervenido, aprobando una proposición no de ley para incentivar fiscalmente este segmento, buscando condiciones favorables similares a las de la industria audiovisual en las islas. Los beneficios del turismo MICE para Canarias son indiscutibles. Este tipo de turismo no solo diversifica la oferta turística y mejora el posicionamiento del destino, sino que también atrae a un público de alto poder adquisitivo, generando un impacto económico superior al turismo convencional. Además, contribuye al desarrollo económico local y a la creación de empleo, según destaca un informe de PwC. Ante este escenario, es crucial una colaboración efectiva entre todos los actores implicados, desde el sector público hasta el privado, incluyendo gestores de infraestructuras y organizadores profesionales de congresos (OPC). Canarias tiene el potencial para convertirse en un líder del turismo MICE, tal como lo ha demostrado en otras regiones de España. El desafío ahora es unificar esfuerzos y estrategias para que este segmento florezca en el archipiélago, aprovechando sus innegables ventajas para atraer y satisfacer a este mercado específico.